Los vendedores del Mercado Central de Valencia están preocupados por su futuro y han querido expresar, en el Pleno del Ayuntamiento, celebrado hoy, una vez más, su profundo malestar por la inacción y falta de respuesta por parte de la Concejalía de Comercio del Ayuntamiento en relación con la prórroga del actual modelo de gestión por los propios vendedores y las consecuencias a partir del 1 de enero de 2020, que, de no producirse, les abocaría a la paralización.
Vicente Moreno, que ha intervenido en el Pleno como portavoz de la Junta de la Asociación de Vendedores del Mercado Central, ha alertado de un “regreso al pasado” en esa fecha si el Ayuntamiento no colabora en la búsqueda de una solución respecto al futuro de este mercado emblemático, que se ha convertido en un referente internacional.
Moreno ha lamentado, en su intervención, que la pérdida del actual modelo de autogestión, que se impulsó siendo alcaldesa Clementina Ródenas, del partido socialista, en 1987, las consecuencias, serían “desastrosas para el colectivo de trabajadores, autónomos, clientes, centro histórico y para la Ciudad de Valencia” y supondría “la pérdida de competitividad y, a medio plazo, la decadencia de un mercado inigualable de producto fresco, que degenerará en otra cosa, que a algunos, quizás guste más, pero que en nada se parecerá a este referente actual de los mercados de Europa”.
Moreno ha recordado que, a lo largo de tres décadas, el Mercado Central se ha consolidado como uno de los mejores mercados de Europa, y no solo por ubicarse en un edificio tan emblemático, sino también por su oferta, actividad comercial y servicios a clientes. En este sentido, se ha referido, entre otros servicios, a la venta on line, el servicio a domicilio, la consigna frigorífica, la sala de lactancia, el parking para vendedores y clientes, la señalética y los puntos de información, que se pueden ofrecer gracias a los recursos propios generados por la Asociación (35%), las tarifas que aportan los vendedores (60%) y las subvenciones de diferentes administraciones (5%). Y es que no hay que olvidar que, debido a la gran afluencia diaria de compradores (una media de 15.000 cada día), gracias a estos servicios, cualquier pequeño incidente se resuelve de inmediato sin afectar en absoluto a la normal actividad del mercado y sin que los clientes lo perciban siquiera.
Vicente Moreno ha querido destacar que los logros alcanzados son fruto del esfuerzo, el trabajo profesional y la experiencia de los vendedores -“que llevan décadas gestionando este espacio comercial y conocen la trayectoria y evolución de su sector, del centro histórico, del vecindario y de la ciudad de Valencia y área metropolitana”- y también de los sucesivos presidentes de la Asociación de Vendedores durante los 33 años de autogestión -Vicenta Lloris, Vicente Gimeno, Kiko Dasí y Meche Puchades- junto a los vendedores que han trabajado en sus correspondientes juntas directivas.
Moreno ha resaltado ante los representantes municipales que “existen cauces legales, tal y como hemos aportado en cinco informes técnicos diferentes” y ha añadido que el Ayuntamiento “tiene la obligación de motivar y justificar sus decisiones, explicando claramente los beneficios que se obtiene de un cambio de modelo de gestión”.
Apoyo ciudadano al Mercado Central
Por otra parte, cerca de 3.000 ciudadanos han mostrado su apoyo al actual modelo del Mercado Central por los propios vendedores, a través de las redes sociales, y, presencialmente, en el propio recinto, en 24 horas.
Los ciudadanos han respondido de este modo a la iniciativa de recogida de firmas impulsada por el Mercado Central, en solicitud de su adhesión, para defender este sistema de gestión, y, así, evitar que se pierdan los logros alcanzados a lo largo de 33 años, que se han traducido en importantes servicios para sus clientes.
El apoyo ciudadano se suma al de mercados de todo el país y destacadas organizaciones y entidades valencianas, como la patronal autonómica Confecomerç CV, la Asociación para la Recuperación de Centros Históricos de España Archival, el Gremio de Carniceros; las floristerías de la Plaza del Ayuntamiento; Amics del Carme ; y otras entidades vecinales y asociaciones falleras.
Más del 93% de los vendedores del Mercado Central votaron, a principios de este mes, a favor de mantener la gestión propia y los logros conseguidos. Durante los más de treinta años en que el Mercado Central ha dirigido sus pasos a través del sistema de gestión de sus propios vendedores, se ha ido adaptando a los nuevos tiempos, a los clientes y a las necesidades de las nuevas formas de compra y de venta. Este modo de gestión se ha traducido en una capacidad de reacción mucho más rápida que en el resto de mercados, gracias a una gestión directa de recursos.
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